La controversia Sade

Publicado en por Ancejuma

La controversia Sade.

 

“Donatien-Alphonse-François marqués de Sade, escritor y revolucionario odiado, malmirado y per versado por la gracia de la iglesia. Es por la manera  en la que escribe que su nombre ha dado pie a una curiosa perversión o desviación sexual (el Sadismo: Perversión sexual de quien provoca su propia excitación cometiendo actos de crueldad en otra persona[1]). Su vida y su bibliografía desmienten en gran parte la leyenda negra que sobre el marqués de Sade se ha cernido, ni fue un asesino ni un depravado cercano a los mas indignos excesos. Posiblemente razones políticas motivaron la leyenda que se creó en torno a él y sus sucesivas condenas y persecuciones por parte de la justicia[2]”.

Su forma de pensar son una superviviente crítica, un cuestionamiento de raíz a las clases sociales y culturales. Es por ello que Sade estuvo preso la mayor parte de su vida, no por narrar novelas voluptuosas, sino por ser un verdadero subversivo con fuertes ideas libertarias y gustos libertinos sin miramientos en cuanto a las repercusiones que esto conllevara. Primero se opuso a el imperio francés y participó de la Toma de la Bastilla, luego se resistió a la guillotina y a la pena de muerte, ello lo demuestra en cada frase, cada palabra, cada libro.

Mientras que, muchos escritores que se atreven a escribir como él, (Marqués de Sade), han sido tachados de herejes, y como conclusión de esos actos que desaprueban, entes creados para juzgar la moral los condenan a muerte. Ello no precisamente le sucedió así al escritor de Justine y los infortunios de la virtud, pero muchos escritores apuntan que en la última etapa de vida, a Sade lo esconden dentro de un manicomio, en donde posiblemente le aplacarían las aberraciones, que según la iglesia, gozaba. Aún así letras más tarde seguiría su crítica del objeto religioso, dominador para la época, a través de sus libros (Filosofía en el tocador, Los ciento veinte días de Sodoma, Juliette o las prosperidades del vicio…).

 “En la era de la Razón, Sade hace uso de sus márgenes para justificar los crímenes más atroces, los libertinos de sus novelas son grandes académicos que desde sus elaborados razonamientos  se proponen justificar filosóficamente las más terribles infracciones a las autonomías individuales”[3].

Sade fue un individuo que se alejo totalmente del comercio, por lo tanto sus obras no buscaban lucro, al contrario, la razón de ser de sus obras era por medio de sus palabras hacer de la sociedad una élite crítica, que no se dejara llevar por palabras argumentadas con finalidades banas.

En la filosofía en el tocador Sade hace un alter ego del cómo algunas gentes pretenden avasallar la mente del otro; ello lo  encarna en Eugenia así: Ella quien es una adolecente que crece con el consejo de sus padres religiosos, y quien  solo sabe que la vida fue hecha para entregársela en cuerpo y alma a Dios, ese dios que Sade critica tanto, pero supone dentro de sí,  hay algo más, alguna verdad  afuera de las puertas de esa Iglesia, así es cuando Sade decide que ya es hora de mostrarle como es otra punto de vista del globo terráqueo.

 Esta dama, Decide irse para la casa de la que será su mentora, Madame de Saint.Angel, mujer entrada en  edad,  que a su vez convoca  al maestro -como lo explican sus frases- para la instrucción de la joven, con ellos está el Caballero, hermano de Madame; así se completa el circulo pedagógico que se encargara de mostrarle el mundo desde una perspectiva libertina a Eugenia.

Es así  como las personas actuamos ante diversas verdades de alguna manera, es decir cuando nos manifiestan otro matiz del Cómo Ser, nos quedamos en ese punto de vista y  la forma en la que nos desenvolvíamos anteriormente  se queda en el pasado ¿Por qué?

La crítica que le hace, Sade al estado, en la Filosofía en el tocador, se hace notar en cada frase de la misma hasta llegar a su culmen, dentro de  la embriaguez del cuerpo de su personaje principal.

Por otro lado, vale la pena decir que el Marqués de Sade fue un tipo  controvertido y emblemático, puesto que al momento de contraer matrimonio con una mujer perteneciente a la aristocracia, decide llamar a una prostituta con la que va a aplacar sus deseos sexuales con toda clase perversiones.

Quizá, una crítica que algunos textos han planteado es: “Sade se arrepiente de su forma de vida y por ello cada expresión escrita va en contra de lo que se llama la tradición familiar, ya que su tío fue el ser que lo inicio en una vida de excesos y voluptuosidades” [4]

Pero en realidad no se sabe nada de ello, puesto que aunque haya textos que se opongan a otros,  nunca se sabrá  a ciencia cierta lo que  Sade decía, ya que cada novelista  toma partido de lo que lee y ello lo plasma a su manera en cada artículo.

Por lo tanto toda la obra “Sade” es una vociferada denuncia a los excesos y perversiones del poder, no sólo de los nobles sino también de quienes bajo la falsa moneda de la Libertad y la Razón pretenden suprimir al resto.


Aún más

Al detenernos a pensar de qué forma llegarle fácilmente a la población ¿Por qué no ir por la vía de la sexualidad?, tomando este placer carnal y necesidad natural e instintiva como un impulsor y atrayente del pueblo.

Sade, plantea la sexualidad como un medio de liberación a todos los condicionamientos y limitantes sociales, el libre desarrollo de la sexualidad es un inicio de ese proceso liberador propuesto en la Filosofía en el tocador, además de ello la moral y la ética son utilizados cual cortinas de humo para cometer infinidad de actos reprochables para los estamentos que dicen ser protectores del buen estado social de derecho.

Por lo tanto Sade personifica el pueblo en Eugenia, mostrándola cual niña sacra, seguidora de dios y la normatividad de su época, al llevar esta “virgen” a un ambiente sin los limitantes a los que estaba sometida, esta demuestra su verdadera naturaleza, demostrándole al lector los deseos reprimidos que posee el pueblo, reprimidos por la iglesia que monopoliza, controla y encamina su comportamiento.

La iglesia ha dado y continua dando los patrones de eticidad y moralidad sociales, basándose en su supuesta iluminación divina, estamentos como estos manipulan la normatividad social en pro de ellos mismos en cuanto les sea necesario y benéfico, Sade nos muestra un camino muy opacado y a la vez custodiado por los entes opresores del cambio y la liberación.

La senda de normatividad establecida en esta época, está según el planteamiento de Sade siendo un limitante político-religioso, al legislarnos desde la cuna hasta la muerte nos están sometiendo bajo el yugo de la pasividad, tornando al pueblo incapaz de proponer y actuar en aras de sus propios deseos.

Dentro del ciclo natural de la vida, el acto de matar es algo que debe ocurrir, ya que forma parte de la psicología animal y humana, siendo esto reprimido y litigado bien sea en una cárcel o descabezando al asesino, se encuentra de nuevo esta flexibilidad normativa del ¡el asesino es malo y por eso lo tenemos que asesinar!; surge un cuestionamiento inmediato aunque muy diluido a través del tiempo y del condicionamiento al que está sometido el pueblo, el cual ya ni se pregunta el Por qué asesinar al asesino está bien, cuando matar es supuestamente malo.

La ambigüedad y variabilidad de las reglas sociales, morales y éticas nos sumergen en todo un torbellino del que no habrá una salida, la única escapatoria más notoria se encuentra a unos pocos pasos en ese mal llamado espacio de locura, donde confluyen todo tipo de individuos que dan cuenta de las atrocidades barbáricas de los estamentos represores.

Sade en la Filosofía en el tocador muestra una posición a la revolución, siendo esta gestora de múltiples acciones positivas para el pueblo, pero  se apoya en lo mediocre que logra ser un pueblo el cual se ha dejado segar por las maravillosas virtudes de lo logrado.

 (…) “A LOS LIBERTINOS

Voluptuosos de todas las edades Y de todos los sexos, a vosotros solos ofrezco es-ta obra: nutríos de sus principios, que favorecen vuestras pasiones; esas pasiones, de las que fríos e insulsos moralistas os hacen asustaros, no son sino los medíos que la naturaleza emplea para hacer alcanzar al hombre los designios que sobre él tiene; escuchad sólo esas pasiones deliciosas, su órgano es el único que debe con-duciros a la felicidad.” (…)

Al inicio del texto y al encontrarse con el prefacio, se nota que este es muy peculiar, ya que nos plantea algo muy interesante y es que todos poseemos pasiones, el dilema es la represión que sobre ellas tenemos(…)“esas pasiones, de las que fríos e insulsos moralistas os hacen asustaros”(…) Refiriéndose a la opresión cultural a la que se esta sometido e incitándonos a la liberación puesto que es por la naturaleza y gracias a ella que poseemos estas pasiones y las debemos satisfacer.

 “Sólo me dirijo a personas capaces de entenderme, y éstas han de leerme sin peligro[5]" son esas frases que enmarcan la realidad de la subjetividad de Sade, “Decir que la filosofía en el tocador es una obra literaria excelente es falsear, ya que esta obra debe catalogarse como fuera de lo común, porque rompe con el contexto para ese período, quizá lo que el marqués quería era que lo leyeran, puesto que en la era de la revolución francesa habían muchos escritores y eso lo motivo a escribir de otra manera, a la cual era muy probable que llamara la atención puesto que lo nuevo rompe con todos los esquemas ” Expreso Alberto Gil, jefe departamento de Psicologia de la Universidad de Antioquia.

Al detenernos en esta parte del texto nos encontramos con una lección de vida muy poco ortodoxa: (…) “DOLMANCÉ, (con sangre fría.)

Y bien, amigos, en mi calidad de institutor yo suavizo la sentencia; pero la diferencia entre mi sentencia y las de ustedes es que éstas sólo eran producidas por una mistificación satírica, en tanto que la mía se va a realizar. Abajo tengo un valet que posee uno de los miembros más hermosos que debe haber en la naturaleza, pero que por desgracia destila virus y está roído por una de las sífilis más terribles que se hayan visto en el mundo; lo haré subir: él arrojará su veneno en los dos conductos naturales de esta querida y amable dama, para que durante todo el tiempo que duren las impresiones de esta cruel enfermedad, la puta se acuerde que no tiene que sermonear a su hija cuando ésta se haga coger.---Lapierre, coge a esta mujer: ella es extraordinariamente sana; este placer te puede curar:- a veces ha ocurrido así.[6]”(…)

Es muy interesante la utilización de las palabras en el aparte anteriormente citado, ya que en el, al intentar concluir el texto, le esta dando una lección a la opresora, madre de Eugenia, con los mismos placeres que tanto repudiaba y a los que esperaba nunca se enterara su hija. En el trasfondo esta una idea muy atractiva, la cual nos muestra  que al revelarnos contra el sistema nunca lo que podremos someter totalmente, en caso de que se lograse alguna modificación de este, siempre habrá un remanente de esto.

Se puede deducir una relación lector-obra, obra-lector al tener conocimiento del cómo se debe enfocar y lograr comprender entre líneas lo que muy maquillada o descaradamente nos comunica Sade con cada una de sus palabras, es lo que hace de esta lectura sea positiva o no, pues somos tan superficiales, que algunos se satisfacen con una lectura rápida y somera, quedando con ideas simples y vagas del planteamiento presentado en la obra, ¿por qué no se va más allá?

La Filosofía en el tocador es  una  obra  de  las  que  aún en nuestros tiempos no logra ser vista con agrado por parte de moralistas y humanistas, aunque en realidad la obra no es buena en términos literarios, lo que si es digno de aplaudir es la instrucción en torno al sentido critico que deja en cada lector, brindándonos una nueva perspectiva en cuanto a ver nuestro entorno.

En el ámbito de un comunicador el legado que deja la obra de Sade es muy importante, ya que nos lleva a aceptar la diversidad y captar nuevas ideas del mundo, a raíz del estar impregnados de una ideología católica, moralista y ética.

Al contrario de aquellos que polemizan la lectura de Sade, me identifico con ella y debato a su favor, tomando como base lo positiva que puede ser esta lectura, además es muy agradable confrontar este tipo de lectura con las lecturas usuales y tradicionalistas, debido a que ella se sustenta y reafirma a través de sus líneas, ya que fundamenta cada palabra como si estuvieran  ad portas a la muerte.

Para  finalizar cabe recalcar que sus novelas son alhajas de una época, evidencias que sólo aceptan ser leídas en un hilo histórico; su autor es al mismo tiempo personaje, víctima y libertino, noble y revolucionario. Han pasado 200 años, aproximadamente, Sade sigue generando pasiones y controversias..., quizás sea el tiempo el encargado de reconocer a los genios.

Además del estilo literario, exhotico y burdo, el cual pudo ser el principal factor de su condena a muerte, vale la pena decir que resurgió por medio de sus letras (las mismas que lo condenaron) y ahora dan cuenta fiel de sus intenciones permeando hasta el mas efímero y pusilánime remedo de intelectual que ose acercase a sus páginas.

 


BIBLIOGRAFIA-CIBERGRAFIA


- DALMASSO, Gianfranco: La política de lo imaginario: Rousseau/Sade. Ediciones Encuentro, Madrid, 1983.
- JEAN, Raymond: Un retrato del Marqués de Sade: El placer de la desmesura. Gedisa editorial. Barcelona, 1990.
- MARQUES DE SADE: Filosofía en el tocador. Clásicos de Siempre. M.E. editores. Madrid, 1996.
- SADE: La filosofía en el "boudoir". Libros Buen Amor, Loco Amor. 1975.
- VOVELLE, Michel: Introducción a la historia de la Revolución Francesa. Círculo de Lectores. Barcelona, 1989.
- YLLÁN, Esperanza: La revolución Francesa. Biblioteca Básica de Historia -Monografías-. Anaya, 1989.

http://www.criticadelibros.org/8477026068 visitada 20 de mayo de 2009. 17:15

http://www.scribd.com/doc/6703211/Sade-Filosofia-en-El-Tocador visitada 12 mayo de 2009. 19:39

 



[1] Microsoft® Encarta® 2008. © 1993-2007 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos

[2] www.lavisión.com.ar visitada 24 de mayo de 2009. 14:45

[3] http://www.elforro.com/literatura/48300-opinion-marques-de-sade.html visitada 24 de mayo de 2009 15:02

[4]http://www.criticadelibros.org/Marqu%E9s-de-Sade  pagina visitada mayo 21 de 2009.14-36.

[5] http://www.elforro.com/literatura/48300-opinion-marques-de-sade.html

Visitado 16 de mayo. 22.19

[6] Sade, Márquez. La filosofía en el tocador. 1795, editorial Norma, traducción

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